miércoles, 30 de marzo de 2011

Refranes de la salud, la edad y la muerte

5 comentarios:

  1. La salud no es conocida,
    hasta que es perdida.

    Una cosa hay que vale más que el Perú,
    la salud.

    La salud es un tesoro,
    que vale más que el oro.

    La salud no tiene precio,
    y el que la arriesga es un necio.

    Entre salud y dinero,
    salud (primero / quiero).

    Salud y dinero haya,
    que lo demás no vale dos habas.

    Con salud y dinero,
    hago cuanto quiero.

    Salud, dinero y buen vino,
    e irme a la gloria de camino.

    Salud y pesetas,
    que lo demás son puñetas.

    Salud sin trabajo,
    campana sin badajo.

    La salud no está en el plato,
    sino en el zapato.

    Para buena salud, poca cama, poco plato,
    y mucha suela de zapato.

    Poco sol, poca cena y poca pena,
    y tendrás salud buena.

    Salud y alegre ánimo,
    a cualquier costo es barato.

    Salud y alegría,
    belleza cría,
    atavío y afeite,
    cuesta dinero y miente.

    Salud y bellaquería,
    son fuentes de alegría.

    No llames virtud,
    a lo que te hace perder la salud.

    Sin virtud,
    poco vale la salud.

    Si salud tienes,
    hartos bienes.

    ¿De qué te sirven tus bienes?,
    si salud no tienes.

    Quien salud no tiene,
    de todo bien carece.

    Hasta la salud,
    quiere descanso.

    Nadie quiere la salud,
    más que el enfermo.

    Salud perdida,
    salud gemida.

    Salud perdida,
    velas encendidas,
    salud recobrada,
    velas apagadas.

    No hay cosa tan buena como la salud,
    ni tan mala como el ataúd.

    En sana salud,
    no se piensa en el ataúd.

    Para poca salud,
    las cuatro velas y el ataúd.

    Para tan poca salud,
    (mejor morirse / ninguna).

    Mientras el hombre no muere,
    salud espere.

    La salud es lo que no se pega,
    que las enfermedades, hasta se heredan.

    Es gran parte de la salud,
    el conocer la enfermedad.

    Las enfermedades,
    poco a poco se hacen.

    Enfermedades graves,
    no se curan con paños calientes, ni con jarabes.

    Enfermedad larga,
    cruz a la espalda.

    Para enfermedades de años,
    no hay medicina.

    Al enfermo que es de vida,
    el agua es medicina.

    Échate a enfermar,
    y verás quien te quiere bien y quien te quiere mal.

    Enfermos indigentes,
    no tienen amigos ni parientes.

    Enfermo que come y mea,
    el diablo se lo crea.

    Enfermo que hace por comer,
    a la vida tiene fe.

    Enfermedad que no estorba para dormir ni comer,
    poco médico ha menester.

    La enfermedad y el anciano,
    siempre de la mano.

    A enfermo, niño y anciano,
    hay tenderles la mano.

    A los enfermos,
    los sanos dan saludables consejos.

    Donde hay consejo,
    hay salud.

    Quien no tienen compasión,
    excusas pone al dolor.

    A enfermo de encontrón,
    medicina de trompón.

    Para buena vida,
    orden y medida.

    La mala vida, arrugas cría,
    la buena, las quita.

    Donde entra el aire y el sol,
    no entra el doctor.

    Para una vez que se lavó,
    hasta el culo se le vio.

    Una mano lava la otra,
    y ambas la cara.

    Mano lavada,
    salud bien guardada.

    De golosos y tragones,
    están llenos los panteones.

    No hay que confundir la gordura,
    con el hinchazón.

    La gordura del dichoso,
    enflaquece al envidioso.

    Engordar para vivir,
    no es gordura de reír.

    Engordar para morir,
    es mal vivir.

    Ajo, cebolla y limón,
    y déjate de inyección.

    Al desganado,
    darle ajos.

    No hay cosa más sana,
    que comer en ayunas una manzana.

    Comamos manzanas todo el año,
    y la enfermedad sufrirá un desengaño.

    Una manzana cada día,
    el médico te ahorraría.

    Del comilón y el vinoso,
    viene el gotoso.

    El comer, a muchos mata,
    y la dieta, a muchos sana.

    Dieta y no recetas,
    y tendrás salud completa.

    Más cura una dieta,
    que diez recetas.

    La mejor medicina,
    es la buena cocina.

    Buena es la quina,
    pero tanta, no es medicina.

    En lo amargo está lo bueno,
    y en lo más dulce, el veneno.

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  2. De lo bueno, tragues,
    y con lo malo, ni te enjuagues.

    Bueno es el cilantro,
    pero no tanto.

    Con aceite de bellota,
    sale pelo hasta en las botas.

    Para las verrugas,
    saliva en ayunas.

    Con un huerto y un malvar,
    hay medicinas para un lugar.

    La sencilla flor de malva,
    infinitas vidas salva.

    Si te curas con malvas,
    mal vas.

    Ortiga me quemó,
    y mastranzo me sanó.

    Hay venenos,
    que para sacar a otros son buenos.

    El vino en jarro,
    cura el catarro.

    En Jerez de la Frontera,
    tienen por botica las bodegas.

    El vino de jerez,
    buen jarabe para la vejez.

    Aceite y vino,
    bálsamo divino.

    Aceite y romero frito,
    bálsamo bendito.

    De las virtudes del romero,
    puede escribirse un libro entero.

    La hierba conocida,
    ésa aplica a tu herida.

    Con aceite de candil,
    curar grandes males vi.

    Mala es la llaga,
    que con vino no sana.

    Mala es la llaga,
    que el romero no la sana.

    Llagas untadas,
    llagas aliviadas.

    Llagas hay que no curan,
    y toda la vida duran.

    Llagas viejas tarde curan,
    o nunca curan.

    Llaga incurable,
    vida miserable.

    Llagas y cuentas viejas,
    malas llagas y malas cuentas.

    Llaga de coyuntura,
    tiene mala cura.

    Llaga ajena,
    no da pena.

    Refregadas,
    duelen más las llagas.

    Lo que quema,
    cura.

    Mírame,
    y no me toques.

    Mal se sienta y mal se siente,
    quien almorranas tiene.

    Cada cual a su manera,
    se combate la piojera.

    Azote y mordedura,
    mientras duele, dura.

    El golpe de la sartén,
    siempre tizna y no hace bien.

    A gran subida,
    gran caída.

    Peor es la recaída,
    que la caída.

    Más vale evitar el riesgo,
    que pedir el ungüento.

    Todo salto,
    tiene riesgo.

    A gran salto,
    gran quebranto.

    El llanto,
    alivia el quebranto.

    Mejor compostura tiene el hueso,
    que el seso.

    Cuando el pie se desliza,
    la cabeza se eriza.

    Prefiere la deshonra de la caída,
    a la deshonra de las muletas.

    Porque otro se tire por un balcón,
    no voy a tirarme yo.

    Quien quiera tener el ojo sano,
    átese la mano.

    Fue a santiguarse,
    y sacose un ojo.

    No es nada lo del ojo,
    y lo lleva en la mano.

    Es ruin arrojo,
    por ver a otro ciego, sacarse un ojo.

    Quien quiere y no puede,
    gran mal tiene.

    Mal que se tiene porque se quiere,
    no duele.

    Mal que se cura durmiendo,
    seguro que entró bebiendo.

    Los males entran por arrobas,
    y salen por adarmes.

    Deprisa viene el mal,
    pero cojeando se va.

    Mal de muchos,
    remedio de pocos.

    Mal de muchos,
    consuelo de bobos.

    Males que vienen,
    achaques tienen.

    De un gran mal,
    queda la señal.

    Es mala señal,
    cuando no se siente el mal.

    El mal y el bien,
    en la cara se ven.

    Males otoñales,
    o largos o mortales.

    Cerezas y males,
    traen detrás otros males.

    Bien de mis males,
    mal de mis bienes.

    Bien hayan mis bienes,
    si remedian mis males.

    Mal ajeno,
    no cura el mío.

    Mal ajeno,
    no cura mi duelo.

    Mientras el mal persevera,
    sufre y espera.

    Mal que se hizo viejo,
    se suelta con el pellejo.

    Mal largo,
    muerte al cabo.

    Atajar al principio el mal procura,
    si llega a echar raíz, tarde se cura.

    Si tu mal, tiene remedio ¿por qué te preocupas?,
    y si tu mal no tiene remedio ¿por qué te preocupas?.

    El mal que no tiene remedio,
    olvidarlo es el mejor medio.

    Para cura de mis males,
    me vinieron más pesares.

    Los pesares,
    envenenan la sangre.

    Malo es esperar (bien / salud),
    de muerte ajena.

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  3. Esperar salud en muerte ajena,
    es condena.

    Mal habiendo y bien esperando,
    morirme he de triste y no se cuando.

    Mal encubierto,
    pronto tocarán a muerto.

    Dios nos libre de sufrir,
    todo lo que el cuerpo pueda resistir.

    Mal es sufrir,
    pero sufrirlo mal, es mayor mal.

    Quien teme a sufrir,
    sufre de temor.

    Los grandes sufrimientos,
    no tienen lágrimas ni lamentos.

    Honesto es el temer,
    cuando se ve a otro padecer.

    A quien le duela la muela,
    que la eche fuera.

    Lo que es bueno para el diente,
    es malo para el vientre.

    Mal haya el vientre,
    que del bien recibido no le viene miente.

    Para el cólico, lavativa y pilocarpina,
    como única medicina.

    De un cólico de vino y de espinacas,
    no se muere ningún Papa.

    No cura el flato la sangría,
    sino la buena malvasía.

    Contra el flato,
    bicarbonato.

    Unos cascos de naranja agria en ayunas,
    la bilis arreglan y al estómago ayudan.

    Entre el arroz que tapa y las uvas que sueltan,
    está la cosa resuelta.

    Agua caliente,
    salud para el vientre.

    Agua fría y pan caliente,
    nunca hicieron buen vientre.

    El mal de vientre,
    no se cura con agua caliente.

    Agua corriente,
    sana a la gente.

    Agua, no enferma ni embriaga,
    ni endeuda.

    Agua fría y pan caliente,
    mata a la gente.

    Agua cocida,
    sabe mal pero alarga la vida.

    Con agua de malvavisco,
    se cura hasta el obispo.

    Agua sobre agua,
    ni cura, ni lava.

    El agua,
    la vista aclara.

    Agua fina,
    saca espina.

    Agua y nieve excesiva,
    no deja criatura viva.

    Agua escalentada,
    más presto es resfriada.

    Resfriado cocido,
    dalo por ido.

    Al catarro,
    con el jarro.

    Para el catarro,
    el jarro,
    y si no se quita,
    la botellita.

    Gran constipado,
    culo apretado.

    Una tos que se hace añeja,
    puede costarte la pelleja.

    Mano fría, y pie caliente,
    salud competente.

    Manos frías,
    corazón (ardiente / caliente).

    En caliente,
    ni se siente.

    Mejor sudar,
    que toser y tiritar.

    Al sudado,
    agua fría a un lado.

    Rostro del fuego, piernas del río,
    y del pecho aparta el frío.

    Media vida es la candela,
    pan y vino, vida entera.

    El vivir templadamente,
    hace sana y rica a la gente.

    En la playa, un mes,
    y en el campo, tres.

    De abrigado a nadie vi morir,
    de desabrigado si.

    Fiebre cuartana,
    no hace sonar la campana.

    Cuando la fiebre declina,
    tiempo propicio de dar quina.

    (Calenturas / fiebres) otoñales,
    largas o mortales.

    Calores, dolores y amores,
    matan a los hombres.

    Gran bien es castidad,
    pero ¿dónde está?.

    El día que te casas,
    o te sanas o te matas.

    Los placeres, por onzas,
    y los males, por arroba.

    Al lado siempre es menor,
    de la mujer el dolor.

    Quien tiene dolencia,
    abra la bolsa y tenga paciencia.

    Dolencia luenga,
    muerte zaguera.

    Dolencia larga,
    lleva la muerte en zaga.

    A cualquier dolencia,
    es remedio la paciencia.

    Dolor contado,
    al punto aliviado.

    Dolor quejado,
    dolor aliviado.

    A cualquier dolor,
    paciencia es lo mejor.

    A quien le duele el dedo,
    se lo mira a cada credo.

    Miembro doliente,
    reposo quiere.

    El tener muchos dolores,
    endurecen los corazones.

    Un dolor se aplaca,
    con otro mayor.

    Un dolor alivia otro dolor,
    y un amor cura de otro amor.

    De dolor,
    nadie murió.

    Dolencias y pensamientos,
    envejecen al hombre.

    Quien mal padece,
    mal parece.

    Quien por su gusto padece,
    que vaya al infierno a quejarse.

    Quien se queja,
    sus males aleja.

    La enfermedad del delicado,
    poco mal y bien quejado.

    Hasta que es padecido,
    el mal no es conocido.

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